“En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros: En que Dios envió a Su Hijo unigénito, para que vivamos por Él. En esto consiste el amor: No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amo a nosotros, y envió a su hijo en propiciación por nuestros pecados. Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros”. – (1ra de Juan 4:9-11)Si Dios nos amó a nosotros primero, debemos amar de la misma forma ¿Cómo hacemos esto? Su palabra es clara; amando nosotros primero a los otros, entregándonos a sí mismos como Él se entregó. Aquellos que son capaces de hacer esto son obedientes a su mandamiento: “Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”. – (Juan 15:12-13) Y nosotros hemos conocido y creído el amor de Dios. Dios es amor. Y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él. – (1ra de Juan 4:16)¿Por qué amar a así? Porque, la cura para el pecado de este mundo es el amor, permanecer en amor = permanecer en Dios. Por el contrario, “El odio despierta rencillas; pero el amor cubrirá todas las faltas” – (Proverbios 10:12) El Señor cubrió nuestros pecados al morir por nosotros, por lo tanto, el amor es nuestra evidencia de nuestra salvación. Amor = perdón. “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia” - (Jeremías 31:3) El amor es la luz del reino de Dios, lo que permite que haya claridad en las vidas de los hijos. Dios es luz y amor: “Pero si vivimos en la luz, así como él está en la luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de su hijo Jesucristo nos limpia de todo pecado” - (1ra Juan 1:7) La luz o “tener luz” no sólo significa conocimiento o esclarecimiento de la inteligencia, en la biblia, luz significa amor (Luz = amor) “...y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios”. - (Efesios 3:19) El aprender a amar a la manera de Jesucristo, nos lleva a una comunión mayor: “El que ama a su hermano, permanece en la luz, pero el que odia a su hermano está en la oscuridad y en ella vive, y no sabe a dónde va porque la oscuridad no lo deja ver” - (1ra Juan cap. 2 10:11). Oscuridad = egoísmo, individualismo v/s Luz = amor, comunión. “Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor” - (1ra Corintios 13) El amor hace visibles los frutos que produce: “Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Hermanos, que el amor de Dios resplandezca en nuestros corazones. "En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos". -1ra Jn 3:16